viernes, 9 de agosto de 2013

Nuestro veneno cotidiano


  

2 comentarios:

  1. "Natural", esa es hoy la publicitaria consigna. Alimentos naturales, cosméticos naturales, tejidos naturales, energía natural... Todo lleva esa etiqueta que certifica que un plátano es natural y que el agua es natural... (¡!) Pero, como dijo el poeta, "se canta lo que se pierde". Toda una gigantesca y monopolizada industria, negocio redondo que, a la par que "alimenta" a millones de personas, produce las enfermedades y comercia con los remedios, círculo infernal y tan rentable como difícil de romper. Vivimos sometidos e inmersos en un inextricable amasijo de corporaciones interrelacionadas; industria alimentaria, farmaceútica, bélica, química, eléctrica, hidrológica, mediática... Una compleja y tupida tela de araña envuelve y recorre cada rincón del planeta.
    Como bien señalan tus etiquetas: un sinvivir.

    Salud! (sin aditivos ni conservantes)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Salve Loam!

      No puedes tener más razón, yo sigo alucinando con los yogures "sin gluten" y el chorizo "sin lactosa" que cacarean en los supermercados y algunas cosas aún más exóticas.

      Comemos tanta porquería, a nuestro pesar, que deberíamos donar nuestros cuerpos a la ciencia o poner en las tumbas epitafios modelo:

      "Warning Toxic Waste" ☢

      Eliminar