En los días de calor estepario como hoy, recuerdo haberme sentido en sincronía con los paisajes y las historias de las novelas de Estefanía que leía a escondidas en la casa del abuelo.
No he pasado tan mala noche como creía para haber visto "Insidious" y estar leyendo "Los mitos de Cthulhu", deben ser el solecito y el buen tiempo que me acompañan a la cama y despejan las brumas del país de las pesadillas.